Por la mañana ha amanecido nevando intensamente en Tignes. Buena suerte para los que se quedan y alguna complicación con el tráfico. Por suerte, nuestro chofer Jaime ha venido antes de hora y hemos salido con media hora de adelanto sobre la hora prevista. Bien, porque hemos llegado al aeropuerto de Geneva con el tiempo justito.
Escapando de "la gran nevada"
Por el camino, a través de las conversaciones de Jaime por el móvil, hemos ido siguiendo las desventuras de un grupo de escoceses a los que el chofer Erik ha ido a buscar demasiado tarde... no sabemos el desenlace pero tenía toda la pinta de que iban a perder el avión a Glasgow. (¡suerte!)
Y al llegar a Madrid nos hemos ido a ver a Carlitos. Los padres están encantados: Iciar estupenda tras las dificultades del parto y Miguel hecho un padrazo. ¡Enhorabuena!
Y aquí termina la semana de esquí en los Alpes 2008. ¿como superaremos esta semana el año que viene? Ya estamos haciendo cuentas para irnos a Aspen.
¡El año que viene más!